Conoced la verdad y ella os hará libre


Ayuno y Abstinencia

22.02.2013 22:33

Ayuno y abstinencia son muy buenas maneras para avanzar espiritualmente. Obviamente el ayuno tiene indudables efectos espirituales. Uno de ellos es que llena al alma de gusto por las cosas del Reino de los Cielos. Con una medida tan simple, es siempre sorprendente como el espíritu se fortalece. Debo reconocer que no es mucho lo que he practicado al respecto, más bien, yo diría que nada. No obstante, nunca es tarde para comenzar ha realizar actividades que se enmarquen dentro del ámbito de lo beneficioso para el cuerpo y el espiritu.

Además de limpiar el cuerpo, la práctica del ayuno y la abstinencia traen consigo un preciado beneficio: Adelgazar. Eso si, lo primero que hay que tener para iniciar un ayuno es la fuerza de voluntad suficiente, la cual creo tener, o sino no podria subir cerros con mi cleta, el último, el volcán Villarrica camino andaribeles. Lo que me falta ahora es escoger el ayuno y abstinencia que mejor me acomode. A continuación un resumen con los ayunos que encontre desde la visión cristiana. Los invito a escoger uno:

 

1. El ayuno eclesiástico: Este ayuno es obligatorio el Miercoles de Ceniza y el Viernes Santo. Consiste en hacer una sola comida normal en el día, y una frugal colación a la hora del desayuno y de la cena. Por ejemplo, una fruta, o un poco de pan, o un yogur. El ayuno se rompe si se come entre comidas o se toma algún líquido que es considerado comida ( batidos, pero no leche ). Bebidas alcoholicas no rompen el ayuno; pero parecieran contrarias al espíritu de hacer penitencia.

 

2. El ayuno a pan: Consiste en hacer tres comidas al día, pero sólo a pan y agua.

 

3. El ayuno de la cena: Consiste en irse a la cama sin cenar. Este ayuno se puede hacer dos o tres veces a la semana. Pudiéndose tomar una fruta a la hora de la cena si se desea. Otras personas pueden preferir el ir al trabajo sin desayunar. Muchos les dirán que ir sin desayunar es una locura: que no se rinde, que después comes más, etc. Pero en las iglesias orientales ésta es una práctica común.

 

Si el ayuno parece una medida muy dura para empezar, se puede hacer penitencia practicando la abstinencia. Puede consistir en abstenerse de algo que a uno le gusta- dulces, refrescos, cigarillo, ese cocktail antes de la cena etc. Esto es a elección de cada uno.

Una consideración final. Un cristiano debe ofrecer el ayuno a Dios. Antes que nada estamos obligados a cumplir con nuestras obligaciones en la vida. Cualquier abstención que nos impida seriamente llevar adelante nuestro trabajo como estudiantes, empleados o parientes serían contrarias a la voluntad de Dios. A tenerlo en cuenta. Personalmente creo que comenzaré con el ayuno de la cena.

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